Autoras:
Beatriz González Fuertes
María Jesús Fuertes Pérez
Ana María Piñera Sueiras
Es importante la colocación de los pacientes en una postura adecuada que asegure una correcta alineación corporal, pero también es importante y necesaria, en el caso de pacientes encamados, la movilización cada dos horas con el fin de evitar presión excesiva que supondría úlceras por presión.
Los objetivos principales de la movilización del paciente en esta unidad es prevenir la aparición de úlceras por presión, prevenir contracturas musculares, conservar el tono muscular entre muchas otras.
Las reglas principales para la movilización del paciente son:
- Antes de movilizar al paciente se debe retirar la ropa de cama, dejando, siempre que sea posible, la sábana encimera para respetar la intimidad del paciente.
- La sábana de arrastre ayuda a mover al paciente a la vez que previene lesiones de piel producidas por fricción.
- Antes de comenzar explicar al paciente lo que vamos a hacer
- Proteger todos los dispositivos que pueda tener instalados el paciente para evitar su desplazamiento.
- Deben ser movimientos constantes y uniformes.
Antes de movilizar al paciente debemos tener en cuenta si está en condiciones o no de colaborar, ya que dependiendo de esto se actuará de una u otra manera. A continuación, se explican algunas de las formas de movilización que se utilizan en este servicio.
En el caso de un paciente que no colabora serían necesarios mínimo dos celadores, que actuarían de la siguiente forma:
- La posición de la cama debe de ser plana o la más baja posible.
- Cada celador se colocará a un lado de la cama frente al enfermo.
- Los pies del celador estarán separados con las rodillas ligeramente flexionadas.
- Se retira la almohada.
- Cada celador introduce un brazo por debajo del hombro del paciente y el otro por debajo del muslo.
- Por último, se sujeta al paciente y se va levantando poco a poco hasta la posición deseada.
Por otro lado, tenemos el caso del paciente que colabora. En este caso solo será necesaria la ayuda de un celador para realizar la movilización y se hará de la siguiente manera:
- Se colocará a un lado de la cama, frente al paciente y a la altura de su cadera.
- El paciente debe agarrarse a la cabecera de la cama, flexionar sus piernas de forma que las plantas de los pies queden sobre la superficie de la cama.
- El celador colocará sus brazos por debajo de la cadera del paciente.
- Pedir al paciente que haga fuerza con los pies y los brazos a la vez que le ayudamos a subir hacia la cabecera de la cama.
También podremos movilizar al paciente con ayuda de una sábana. Para ello necesitamos a dos celadores:
Se coloca una sábana entremetida debajo del paciente, desde sus hombros hasta sus muslos. Cada celador debe de enrollar la sábana por su lado, hasta que quede lo más corta posible del cuerpo del paciente, y sujetarla con firmeza. Gracias a esto los celadores podrán desplazar al paciente hacia cualquier lado de la cama.
Es importante que el celador conozca esta necesidad y las diferentes formas de movilizar a un paciente dependiendo de su situación.