Índice
Autores: 1.- Jiménez Menéndez, Alejandro (Auxiliar Administrativo) 2.- Menéndez Antón, Nuria (Auxiliar Administrativo)
Introducción
La resolución de conflictos o “conflictología” es el conjunto de conocimientos, técnicas, métodos, estrategias y habilidades puestos en práctica para comprender e intervenir en la resolución pacífica y no violenta de los enfrentamientos entre dos o más personas. Es decir, hace referencia al manejo adecuado de las emociones basadas en mecanismos formales e informales que las partes utilizan para resolver sus diferencias.
Resumiendo: es el método para poder resolver aquellos conflictos en el ámbito sanitario, evitando la confrontación entre las partes.
Metodología
En el ámbito sanitario no sólo se producen conflictos en las relaciones interpersonales, es decir, como consecuencia de la propia convivencia tanto entre el personal sanitario como entre el personal no sanitario, tanto en las relaciones interpersonales como las jerárquicas; sino que también los producidos con la relación asistencial con los pacientes, familiares y/o acompañantes.
La mediación sanitaria se configura como un método para la resolución de conflictos entre profesionales de la salud, entre los facultativos y los usuarios, o entre los usuarios y la propia institución sanitaria.
Gracias a la Ley 5/2012, de 6 de julio de Mediación, arbitraje y resolución extrajudicial de conflictos, se aprecia una gran evolución de este método de resolución de conflictos.
Desarrollo
El objetivo es la creación de la figura del “mediador profesional” cuya principal función es facilitar el acercamiento de las partes enfrentadas y, por lo tanto, la resolución extrajudicial del conflicto surgido, será quien se encargue de encauzar el proceso desde una posición de neutralidad muy cuidada; dicha vía de resolución es utilizar técnicas de comunicación y diálogo a través de la comunicación entre las partes y la búsqueda de soluciones gracias a la posición de neutralidad de dicho mediador.
La principal ventaja es que aporta mayor agilidad a la resolución de posibles conflictos; puesto que algunos conflictos no es preciso resolverlo a través de la aplicación de la legislación vigente.
Estos mecanismos extrajudiciales de solución de conflictos son una alternativa especialmente idónea para resolver conflictos en el ámbito sanitario; puesto que, entre otras cosas, ahorran costes y disminuyen el tiempo invertido en su conclusión gracias a que se llegan a acuerdos extrajudiciales.
La resolución de conflictos permite mejorar la calidad de la toma de decisiones y de la solución de problemas. Puede facilitar la comunicación abierta y honesta entre los participantes sobre temas relevantes para ambos.
Conclusiones
Todo conflicto tiene consecuencias negativas tanto en el rendimiento personal, como en su eficacia asistencial y, por consiguiente, eso conlleva a una consecuencia también nefasta en el funcionamiento general de la propia institución sanitaria.
Se debe trabajar en equipo para que todo resulte efectivo. Gracias a estos mediadores o facilitadores de acuerdos, es posible; es decir, con la ayuda de una persona imparcial e independiente se evita, en la medida de lo posible, la judicialización del conflicto y creando un espacio de diálogo.
La participación y el diálogo se relacionan en la resolución de conflictos a través de la mediación.
Realmente este sistema se está considerando como efectivo y beneficioso para los conflictos que surgen en muchos ámbitos donde se requieren soluciones pactadas.
Bibliografía
- Ley 60/2003, de 23 de diciembre, Ley de Arbitraje
- Ley 5/2012, de 6 de julio de Mediación, arbitraje y resolución extrajudicial de conflictos
- LOPJ en su art. 38 establece que el Tribunal de Conflictos será el que asuma dicha resolución