Índice
Autores
Primera autora: María Pilar Pablos Fernández (Celador y TCAE)
Segunda autora: Desirée Villabrille Cedrón (Celador, Auxiliar Administrativo))
Tercera autora: Sonia Villabrille Cedrón (Celador, Auxiliar Administrativo)
Resumen
El conflicto está presente en todos los ámbitos donde haya personas, es una factor inherente a los individuos presente en todas las relaciones sociales, de por sí no es un elemento negativo, pero la manera en la que se aborde y gestione puede llegar a tener efectos muy diversos.
Palabras clave: conflicto, resolución conflictos
Objetivos
- Identificar el concepto de conflicto y sus consecuencias
- Distinguir los estilos de afrontamiento de conflictos
Desarrollo
El concepto conflicto hace referencia a la manifestación de intereses opuestos, en forma de disputa, supone una divergencia en los intereses de dos partes. Podemos definir el conflicto como el resultado de la percepción de intereses divergentes, es decir, existe una situación conflictiva cuando una parte percibe que otra se interpone en sus intereses u objetivos; todo conflicto conlleva cierto grado de incompatibilidad percibida por las partes en relación a los objetivos a alcanzar y/o los medios necesarios a utilizar para conseguirlos.
El conflicto es por tanto un producto social, una «consecuencia natural» de la interacción humana, y en el ámbito laboral es muy frecuente que aparezca dadas su características de contacto diario y continuo entre los trabajadores.
Una gran dificultad que surge cuando aparecen los conflictos es valorarlo como oportunidades y no ver solo su aspecto negativo; deberíamos ser capaces de ver el conflicto como un instrumento de mejora y crecimiento personal, que potencie nuestra inteligencia y creatividad.
Ante la aparición de conflictos en cualquiera de los ámbitos de nuestra vida, cada uno nos enfrentamos a ellos de manera diferentes, es lo que se conoce como Estilos de Afrontamiento del Conflicto, en los cuales manejamos actitudes, comportamientos y sentimientos fruto de nuestra experiencia y que vamos modificando de diversas maneras. Estos estilos de afrontamiento son:
✔ Evitación: se evita o se niega el problema, el conflicto es considerado como algo negativo para las relaciones, y se hace como que no existe el problema
✔ Acomodación: como no queremos problemas con la otra persona, le damos la razón a la otra parte, queremos que gane, sea feliz y no poner en peligro la relación, es una manera muy común de evitar el conflicto
✔ Competición: se intentan lograr los objetivos personales a todo costa, aunque sea en perjuicio de la otra parte, se afronta el conflicto como un asunto de “perdida-ganancia”
✔ Colaboración: las partes participan de manera conjunta para que todos logren sus objetivos, generando alternativas al desacuerdo. Es una manera cooperativa de resolver el conflicto de manera constructiva, construyendo un acuerdo que beneficie a todos.
✔ Compromiso: basada en la negociación, busca llegar a acuerdos pactados en los que cada parte renuncia a alguno de sus intereses en busca de una solución que satisfaga parcialmente a ambas
Para manejar los conflictos necesitaríamos ser hábiles en nuestras relaciones, manejar las habilidades sociales, y tener estrategias y herramientas de afrontamiento de conflictos que sean eficaces y eficientes, como por ejemplo: ser empático, asertivo, escucha de manera activa, ser capaz de brindar opciones para solucionar el conflicto en que ambas partes salgan beneficias, hacer que nadie se sienta “perdedor”, valorar las emociones y sentimientos implicados, etc…
Conclusión
El conflicto es toda aquella situación en la que las personas se encuentran inmersas, tienen intereses contrapuestos, pero si la situación se aborda como una oportunidad de crecimiento personal, se convierte en un conflicto positivo; si por el contrario se percibe como una situación de todo o nada, de tu o yo, y solo se ven las aspectos negativos y las perdidas, se convierte en un conflicto negativo.
En función de cómo se perciba y como se trate de solucionar, las partes saldrán reforzadas, más unidas o por el contrario enfrentadas, con disputas continuas y enconadas, incluso en posiciones irreconciliables.
Solo una pequeña parte de las agresiones al personal del ámbito sanitario, salen a la luz, aún hay muchas que no se denuncia, pero están siendo cada vez más frecuentes y más numerosas, por eso es muy importante manejar habilidades y estrategias que nos permitan afrontar los conflictos y abordarlos de manera eficaz evitando y previniendo las situaciones de agresión física que deben ser intolerables y denunciables.
Bibliografía
✔ Curso: Taller de Técnicas de Resolución de Conflictos. Instituto Asturiano de Administración Pública Adolfo Posada, Gobierno del Principado de Asturias. 2009.
✔ Personal Celador en su Trato con el Paciente y la Familia. Instituto Asturiano de Administración Pública Adolfo Posada, Gobierno del Principado de Asturias. 2011.
✔ http://celadoresonline.blogspot.com/