Índice
Autora: María Eva puente Bardón
Introducción
La preparación del celador en cualquier ámbito laboral que desempeñe su trabajo, alargará de manera satisfactoria su trayectoria sin caer en riesgos, gracias a la elaboración del plan de seguridad y sus posibles soluciones.
Normas de trabajo seguro
En el artículo 18 Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales se establece que es un deber de información estar al tanto de los posibles riesgos que entraña la labor de ser celador, en cualquiera de los ámbitos que desempeñe su labor. Aquí señalamos los riesgos más comunes y más frecuentes.
1- Accidentes con líquidos biológicos (salpicaduras, pinchazos, inhalación por vía aérea)
2- Tropiezos, caídas, resbalones, al mismo y en distinto nivel.
3- Sobreesfuerzo o sobrecarga en la movilización de enfermos, equipos, material, etc.
4- Cercanía y exposición a equipos de radiología, radiaciones ionizantes, etc.
5- Incendio.
Es imprescindible tener a mano y utilizar un equipo EPI (ropa de trabajo, mascarilla, guantes, calzado antideslizante), y estar vacunado de Hepatitis A, Hepatitis B, tétanos, difteria, varicela, antigripal, etc.
Trabajar seguro
En caso de acceder a una habitación o sala en situación de aislamiento o ayudar en técnicas o labores con pacientes infecciosos, hay que extremar las precauciones para no contaminarnos ni tampoco contaminar al paciente enfermo.
La utilización de medios mecánicos o complementarios para el transporte y manipulación de cargas evitando así doblar la espalda y forzar posturas. Se harán cambios posturales periódicos y breves paradas.
Intentar y evitar las prisas durante el uso de las sillas de ruedas, camillas, etc., de este modo serán mínimos los atrapamientos o golpes.
Protegerse cualquier herida o erosión que pudiéramos tener en nuestro cuerpo con el fin de aislarla convenientemente de cualquier posible contacto externo.
Por supuesto cualquier manipulación con objetos cortantes ha de ser muy precavida para evitar sufrir heridas.
Las agujas, objetos punzantes o afilados de un solo uso deberán ser depositados en los correspondientes contenedores de seguridad para la eliminación de residuos del grupo III.
Nunca se deberán enfundar de nuevo en su capuchón protector ni se doblarán ni separarán manualmente de las jeringas.
Los guantes siempre se desecharán después de cada contacto, o también si están rotos o perforados.
El personal médico tanto como el personal no Sanitario debe adoptar unos cuidados específicos para protegerse de las radiaciones.
Entre las medidas más importantes encontramos:
– Tiempo limitado de exposición
– Aumento de la distancia entre nosotros y la fuente radioactiva.
– Utilizar apantallamiento y blindajes.
– Las zonas de trabajo, instalaciones y las estructuras han de estar debidamente protegidas.
– Protección del personal con sus procedimientos de seguridad en el trabajo.
– Gestión de los residuos.
– Plan de emergencia.
* Respecto al ámbito laboral, los trabajadores que estén profesionalmente expuestos tendrán su propia definición.
Se delimitarán las zonas y señalizarán los pasillos y entradas y salidas.
Se informará y formará al personal de cualquier cambio en las normas.
Vigilancia Sanitaria.
Conclusión
Utilizar las medidas de protección adecuadas de forma rutinaria haciendo de ello una disciplina de actuación en el día a día laboral, será sin duda la prevención más adecuada a cualquier tipo de riesgo en nuestro lugar de trabajo.
Bibliografía
- Editorial Mad. Temario oposiciones celador
- INSST.- https://www.insst.es/ vigilancia-de-la-salud2