Autor:
Víctor Manuel Arias Rodríguez
Categoría: Celador
Introducción
Una infección relacionada con la atención sanitaria, también denominada infección nosocomial, se define como aquella infección que afecta a un paciente durante el proceso de asistencia en un hospital u otro centro sanitario, que no estaba presente ni incubándose en el momento del ingreso.
Las infecciones relacionadas con la atención sanitaria tienen un importante impacto en los pacientes y los sistemas sanitarios. En la mayoría de los casos, el vehículo de transmisión de los microorganismos desde la fuente de infección al paciente son las manos de los profesionales sanitarios, pero los propios pacientes pueden ser la fuente. Una correcta higiene de manos puede salvar vidas.
El lavado de manos se considerada la medida principal contra la propagación de microorganismos en el ámbito hospitalario. La higiene de las manos incumbe a todos los profesionales sanitarios que se encuentran en contacto directo o indirecto con los pacientes y su entorno durante sus respectivas actividades.
Metodología
Se ha realizado una revisión bibliográfica de artículos y protocolos a través de buscadores como Google, Medline, usando los términos higiene de manos, transmisión de enfermedades, infecciones hospitalarias.
Desarrollo del tema
La higiene de las manos constituye en gran medida el núcleo de las Precauciones Estándar recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y es la medida más eficaz para el control de las infecciones.
La higiene de las manos puede realizarse frotando las manos con un preparado de base alcohólica o lavándolas con agua y jabón. Usando la técnica y el producto adecuado, las manos quedan libres de contaminación potencialmente nociva y segura para la atención al paciente.
La forma más efectiva de asegurar una higiene de manos es realizar una fricción de las manos con un preparado de base alcohólica. La fricción de manos con un preparado de base alcohólica presenta las siguientes ventajas inmediatas:
- la eliminación de la mayoría de los gérmenes (incluyendo los virus);
- el escaso tiempo que precisa (de 20 a 30 segundos);
- la buena tolerancia de la piel.
- el jabón y el preparado de base alcohólica no deben utilizarse conjuntamente.
Hay que lavarse las manos con agua y jabón cuando estén visiblemente sucias o manchadas de sangre u otros fluidos corporales, cuando existe una fuerte sospecha o evidencia de exposición a organismos potencialmente formadores de esporas, o después de usar los servicios.
Las acciones de higiene de las manos tienen más eficacia cuando la piel de las manos se encuentra libre de cortes, las uñas son naturales, cortas y sin esmalte y las manos y los antebrazos no tienen joyas y están al descubierto.
Debemos hacer la higiene de manos:
- Antes del contacto con el paciente.
- Antes de un procedimiento limpio/aséptico.
- Después del riesgo de exposición a fluidos corporales.
- Después del contacto con el paciente.
- Después del contacto con el entorno del paciente.
La higiene de manos con soluciones alcohólicas se realiza con preparados de soluciones alcohólicas y con una duración de 20 a 30 segundos. La técnica consiste en:
- Deposite en la palma de la mano una dosis de producto suficiente para cubrir toda la superficie a tratar.
- Frótese las palmas de las manos la una con la otra.
- Frótese la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos y viceversa.
- Frótese las palmas de las manos con los dedos entrelazados.
- Frótese el dorso de los dedos de una mano con la palma de la mano opuesta, agarrándose los dedos.
- Frótese con un movimiento de rotación el pulgar izquierdo atrapándolo con la palma de la mano derecha y viceversa.
- Frótese la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación y viceversa.
- Una vez secas, sus manos son seguras.
Las indicaciones para efectuar la higiene de las manos son independientes de las que justifican el uso de guantes. El uso de guantes no modifica ni sustituye la realización de la higiene de manos:
- se debe realizar la higiene de las manos antes de ponérselos;
- se debe realizarse la higiene de manos después de quitárselos;
- se debe realizar la higiene de manos al cambiar de guantes.
Conclusión
La correcta higiene de manos supone una disminución de las infecciones hospitalarias, y también una disminución considerable del gasto hospitalario.
Se desaconseja ponerse anillos, relojes, pulseras o joyas durante la prestación de asistencia sanitaria. Las áreas por encima y por debajo de las uñas atraen a los gérmenes, sobre todo si las uñas son largas, están esmaltadas o son postizas.
Bibliografía
– Protocolo de Lavado de manos y uso correcto de guantes en Atención Primaria de Asturias;
– Guía de aplicación de la estrategia multimodal de la OMS para la mejora de la higiene de las manos y del modelo “Los cinco momentos para la higiene de las manos”.
Organización Mundial de la Salud (2013)
– Manual técnico de referencia para la higiene de manos Organización Mundial de la Salud (2009)