Autora:
Eva Puente Bardón
Definición
La comunicación es el nexo entre las relaciones interpersonales.
Para que la comunicación exista es preciso que entren a formar parte estos CINCO elementos:
- El emisor, que es de donde nace el mensaje.
- El receptor, que es la parte a quién llega el mensaje.
- El mensaje, es todo el cuerpo de información que se desea transmitir.
- El código, ya sea lingüístico (oral y escrito) o no lingüístico (visual, auditivo, gestual).En concreto, es el conjunto de signos que permite al receptor entender el mensaje
- Canal de comunicación, es la forma en que se transmite el mensaje, (aire, papel, etc).
Desarrollo
En el Estatuto de personal no sanitario al servicio de las instituciones sanitarias de la seguridad social, vienen agrupadas las funciones de los celadores, exactamente en el artículo 14.2.
Dentro de esta agrupación de labores asignadas al celador, se encuentra la asignada en el artículo 14.2.22, que dice literalmente: “se abstendrán de hacer comentarios con los familiares y visitantes de los enfermos sobre diagnósticos, exploraciones y tratamientos que se estén realizando a los mismos y mucho menos informar sobre los pronósticos de su enfermedad, debiendo siempre orientar las consultas hacia el médico encargado de la asistencia del enfermo.”
El trayecto que sigue la comunicación con el paciente ha de tener un final terapéutico, por eso ya sea en el ámbito de la enfermedad o las formas de conducta en lo que respecta a la calidad de vida, como prevención y educación sanitaria, los trabajadores sanitarios y no sanitarios tienen un papel muy importante que desempeñar.
En el caso de la comunicación del celador con el paciente, es necesario que sepa y más o menos conozca de donde proviene social y culturalmente.
Cuando el celador ha de interactuar con el enfermo o sus familiares, ha de estar atento, sabiendo escuchar, manteniendo siempre un interés, mediante su actitud favorable de atención.
El lenguaje será claro, evitando los tecnicismos, debiendo ser palabras reconocidas en el lenguaje coloquial y las frases han de ser escuetas y concisas; evitando cualquier tipo de tertulia.
No debe interrumpir al paciente cuando trata de expresar alguna preocupación, dolor o situación emotiva.
El celador debe mantener siempre una actitud positiva y evitar cualquier juicio de valor u opinión sobre la dolencia del enfermo. Se procurará crear una atmósfera desenfadada y demostrando cierta empatía hacia el propio enfermo y /o familiares.
Por otra parte, la escucha positiva se refiere a como el celador puede demostrar al paciente mediante un gesto, palmada, sonrisa, etc. que se ha entendido al paciente y comprendido su mensaje.
Conclusiones
La comunicación del celador con los pacientes y familiares ha de ser positiva, asertiva y humana y nunca revelar ningún dato médico fuera de su competencia profesional.
Bibliografía
Celador: MAD la editorial del opositor
www.auxiliar-enfermaría.com
Estatuto del Personal no sanitario