Autora: María Eva Puente Bardón
Introducción
Podríamos empezar enumerando que personas pueden formar el entorno diario dentro de cualquier día laborable con respecto a un profesional sanitario o no sanitario.
Pacientes, familiares, colegas, pupilos, compañeros o tutores, etc.
Cuando un profesional dentro del ámbito sanitario ejerce su oficio o profesión, la mayor parte del tiempo interactúa con otras personas, a través de estas relaciones refleja sus ideas, su competencia profesional y sus valores. No sólo verbalmente si no demostrando con su comportamiento lo que piensa, importa, sus cualidades, su honestidad, sus limitaciones.
Empatía, cordialidad y respeto
Dirigirse al paciente por su nombre, mostrándole cercanía y confianza. Dosificar la información. Usar un lenguaje claro y sencillo asegurándonos que nos comprende.
De todas las variantes de la inteligencia emocional, la empatía es la fundamental para comprender y apreciar los sentimientos en las demás personas.
El aprendizaje de la actitud empática puede ser la clave de un paso adelante y de un buen trabajo en global acerca del trabajo diario de estos profesionales, por lo tanto, se llega a comprobar que la empatía se puede aprender.
Por ejemplo, dos grandes autores de la psicología, como Hogan Empathy Scale recogen la dimensión cognitiva mientras el Measure Emotional Empathy se dirige más concretamente a la afectividad.
Así, definimos empatía como la herramienta para la habilidad de comunicación, la actitud y el proceso.
Ha habido grandes errores respecto a su significado, ya que la popularización de este vocablo favorece conceptos erróneos habituales:
– feelingo, “buena sensación” confundiendo empatía con simpatía.
– contagiarse por la emoción del otro el llegar a vivir ahogados de emociones desbordantes que no le corresponden.
– ser bondadoso, dispuesto, amable, lleva a una visión que les deja vulnerables ante las erosiones del entorno.
Humanización
Al nombrar humanización, también es necesario tratar en que consiste la deshumanización: desde 1901 con la inauguración de la primera cadena de montaje se establece la producción en cadena, cada vez más áreas de nuestra vida se han ido materializando desidentificando. No nos extraña ser un número en el hospital, así como en muchas casillas de nuestra vida.
Pero el desarrollo de técnicas y habilidades de comunicación han permitido avanzar la humanización a gran escala permitiendo la personalización, las gestiones relacionales y eficacia.
El de estar al servicio de cada persona, ya sea paciente, familiar Un sistema sanitario “humanizado” es un sistema cuyo pregón es o compañero, un sistema pensado por y para el hombre.
Un sistema de salud integro que proteja y promueva la salud, que alinee las discriminaciones de toda índole, que ofrezca participar al ciudadano y en resumen que garantice la salud de todos los ciudadanos (Director General del INSALUD 1984, Francesc Raventós)
Conclusiones
Humanizar habla de poder encauzar dignamente la realidad humana por pobre y precaria que sea.
Existen unos valores que no son nunca pobres ni precarios, porque son valores dignos.
Ningún agente externo los puede llevar a desaparecer.
Cuando la presión nos exige nuestra forma de vivir la vida, es difícil autogestionarse y por lo tanto dar lo mejor de nosotros mismos a los demás, por lo tanto, tolerancia y empatía serán las
que sujeten en este caso la dosis diaria de deshumanización.
Bibliografía
- Temario oposiciones Celador. Editoral MAD
- Estatuto del personal No sanitario
- https://formacurae.es/