Índice
Autores:
Esperanza Fernández Valledor
Faustino Rodríguez Menéndez
M. Nieves González Santos
Introducción
Qué son, cómo se clasifican y cómo se gestionan
Desarrollo
Los residuos sanitarios son aquellos que no se descomponen ni se transforman en materia prima y su degradación natural requiere grandes períodos de tiempo, en gran medida están altamente contaminados con sustancias o líquidos biológicos, al haber sido utilizados en tratamientos clínicos.
Según el tipo de residuo que sea se puede clasificar en cuatro grupos:
Grupo I.- Son los residuos que tienen las mismas características que los generados en un domicilio, no específicos de la actividad propiamente sanitaria, como son: papel, cartón, envases, residuos de oficinas y restos de comedores, jardines. Se recogen en bolsas de color negro que se pueden depositar en los contenedores de residuos urbanos.
Grupo II.- Son los residuos no peligrosos derivados de la actividad hospitalaria, tienen una serie de características que hacen que no sean considerados peligrosos por lo que no requieren de ningún tipo de gestión especial (pañales, restos de curas…). Se recogen en bolsas de color verde y también se incorporarán flujo general de los residuos urbanos de recogida municipal, depositándose en los contenedores de residuos urbanos.
Grupo III.- Son residuos sanitarios especiales, se producen a través de la actividad clínica, esto hace que su tratamiento deba ser cuidado y meticuloso ya que pueden presentar riesgos tanto para la salud laboral como para la pública. Dentro de este grupo podemos encontrar varios tipos: infecciosos, anatómicos, sangre y hemoderivados, agujas y material punzante y cortante, vacunas y citostáticos. Su recogida se realiza a través de un gestor autorizado en bolsas de color rojo y contenedores de cierre hermético, trasladándose para su posterior tratamiento.
Grupo IV.– Lo componen los residuos con normativa específica de gestión: peligrosos no específicos de la actividad propiamente sanitaria (aceites usados, residuos radioactivos, residuos de medicamentos citotóxicos y citostáticos, residuos compuestos por restos de medicamentos citotóxicos y citostáticos y todo el material que haya estado en contacto con ellos).
Su recogida se realiza mediante contenedores homologados, rígidos, de un solo uso, y de color azul. Con capacidad de 30 y 60 litros. Y los punzantes que son generados tras la administración de los medicamentos incluidos dentro de este grupo han de ser acumulados en contenedores de punzantes específicos para este tipo de residuos, y existen de varios tamaños, con capacidad de 3l, 5l y 10l.
Los residuos generados pertenecientes a los Grupo I y Grupo II son gestionados a través de ordenanzas municipales, por el contrario los residuos que forman parte de los Grupo III y Grupo IV han de ser entregados a gestores autorizados de residuos, podemos especificar con mayor profundidad y hablar de Residuos Biosanitarios Asimilables a Urbanos reciben el mismo tratamiento que los residuos procedentes de los hogares, incluso en algunas Comunidades Autónomas se eliminan a través de depósito en vertederos.
Los denominados Residuos Biosanitarios se esterilizan, y tras ese proceso se trituran para así finalmente ser eliminados mediante depósito en el vertedero. Otro de los residuos existentes son los Químicos, los cuales se someten a diferentes tratamientos en función de sus propiedades. Por último, nos encontramos con los Residuos de tipo Radioactivos, este tipo será gestionado por la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (ENRESA).
Conclusión
Es muy importante la correcta gestión de residuos en el ámbito sanitario, sobre todo de ls grupos III y IV
Bibliografía
NTP 372: Tratamiento de residuos sanitarios (insst.es)
Microsoft Word – PROTOCOLO RESIDUOS.doc (chospab.es)