Índice
Autoras:
Verónica Lago Gil
Alba García Linde
Palabras clave: Patología, Ejercicio Físico, Tratamiento, Accidente Cardiovascular
Introducción
El ejercicio físico es el proceso que se recomienda de forma sistemática e individualizada, según las necesidades de cada individuo, con el fin de obtener el máximo beneficio para la salud con un número menor de riesgos.
La actividad física es el mejor mecanismo existente para reducir la mortalidad cardiovascular independientemente de la presión arterial y de otros factores de riesgo cardiovascular. La práctica de ejercicio físico en la población produce importantes beneficios para la salud, así como una mejor calidad de vida
Objetivos
– Mejorar la forma física
– Promover la salud mediante la reducción de los factores de riesgo en enfermedades crónicas, aumentando la seguridad durante la práctica del mismo
Métodos
La búsqueda bibliográfica se ha realizado en distintas bases de datos, se han revisado artículos científicos tales como Dialnet, PubMed, así como libros y revistas de ámbito sanitario
Resultados
El ejercicio físico requiere evaluar los niveles de actividad física y los objetivos de respuesta del individuo que incluyen: frecuencia cardiaca, presión arterial, respuesta al esfuerzo, electrocardiograma, etc.
Hay muchos tipos de ejercicios entre los que destacamos: ejercicio de resistencia, ejercicios de fuerza, ejercicios de flexibilidad. Para conseguir un mejor control de la presión arterial es muy importante el ejercicio físico. Realizar 150 minutos semanales de ejercicio físico de intensidad moderada permite cubrir los objetivos mínimos de gasto calórico.
La base de un programa de entrenamiento está compuesto por actividades que movilizan grandes grupos musculares durante espacios de tiempo prolongados. Para la presión arterial uno de los ejercicios más recomendados es el aeróbico produciendo una reducción de hasta 7 mmHg, tanto en la presión sistólica como diastólica, tanto así que es tan eficaz como el tratamiento farmacológico.
Conclusiones
No se ha establecido la cantidad y el tipo de ejercicio físico necesario para conseguir un mejor control de la presión arterial, pero estudios si demuestran que el ejercicio físico aeróbico regular regula una mejor presión arterial necesitando también en muchos casos de tratamiento farmacológico. Los fármacos más adaptables a este perfil son: inhibidores de la enzima angiotensina, antagonistas de los receptores de la angiotensina y bloqueantes de los canales del calcio
Bibliografía
- American college of sports medicine
- Blair sn.physical inactivity
- wwwinternet.com
- Ruiz jr,swi x labelo f. morrowjr, blair sn.