Índice
Autoras:
Pilar Secades Suárez
María Esther Suárez García
Introducción
La alimentación constituye uno de los pilares terapéuticos más importantes durante la estancia de un paciente en el hospital. Una alimentación adecuada permite mejorar clínicamente a un enfermo y, en la mayoría de los casos, evitar la desnutrición relacionada con la enfermedad (DRE), que se asocia a más complicaciones, estancias hospitalarias más prolongadas y un mayor gasto sanitario.
Contenido
Cada vez es mayor esperanza de vida población y también incrementa número de ancianos institucionalizados en diversos centros.
Diversos estudios han señalado que si el paciente ingresa en un centro hospitalario tiene una buena situación nutricional, supervivencia/ recuperación es mejor rápida. En concreto, en una revisión sistemática de los estudios publicados y reseñados en bases de datos cómo MEDLINE, EMBASE, THE COCHRANE, LIBRARY ,EBSCO, CRD DATABASES, CINAHL, PSYCLNFO Y BIOSIS PREVIWS, se analizó la relación entre complicaciones postoperatorias y situación nutricional del paciente, considerando datos de 11 estudios (3527 pacientes) y se comprobó que las complicaciones postoperatorias fueron más frecuentes en pacientes con riesgo nutricional, en comparación con los que no tenían este riesgo.
La mortalidad asociada en el primero de los grupos fue superior respecto a la observada en los pacientes sin riesgo nutricional. Los investigadores concluyeron que los pacientes con problemas nutricionales, antes una intervención quirúrgica, tienen mayor riesgo de complicaciones, mortalidad más elevada y mayor duración de su estancia hospital.
Para valorar el riesgo nutricional de un paciente que ingresa en un hospital se pueden tener en cuenta varios indicadores, uno de ellos considera los datos mencionados en la tabla, valorando diversos aspectos de la vida del individuo, con una puntuación de 0 a 19 puntos; cuando se obtienen>6 esto indica un alto riesgo nutricional 3-5 puntos un riesgo moderado y 0-2 puntos indica un riesgo bajo.
Valoración del riesgo nutricional de un paciente.
Aspectos a valorar – Puntos asignados
- Escaso apetito: 2
- Comer solo una vez por día o de manera irregular: 3
- Tomar 3 o más bebidas alcohólicas por día: 2
- Problemas con los dientes, boca o saliva: 2
- Problemas económicos para cubrir necesidades básicas: 4
- Tomar 3 o más fármacos: 1
- Vivir solo: 1
- Perdida o incremento de peso, en poco tiempo, sin intentarlo: 2
- Dificultad para comer, preparar la comida o comprar: 2
Repercusiones de los problemas nutricionales de individuos hospitalizados, o ancianos institucionalizados en su salud y capacidad
En las personas mayores es frecuente observar el padecimiento de uno o varios factores de riesgo cardiovascular (hipertensión…), en ellos es prioritario marcar pautas pensando en el mantenimiento de la salud a corto plazo, es mejor centrar los esfuerzos en evitar deficiencias que se asocian con mayor riesgo cardiovascular concretamente conviene vigilar y mejorar la situación en relación con los nutrientes reseñados en la tabla.
Nutrientes – Implicación en riesgo vascular
- Vitaminas B2, Niacina, B6, C
Tienen acciones vasodilatadoras, fibrinolíticas y lipolíticas modifican los lípidos lipoproteínas séricas en una dirección saludable.
- Folatos y vitaminas B12, B2, B6.
Su deficiencia condiciona elevaciones de homocisteína
- Vitamina C, B caroteno, vitamina E, Selenio, Zinc, Fotoquímicos
Son antioxidantes necesarios en la protección frente a la formación de radicales libres y ayudan en control de presión arterial.
- Calcio, magnesio, potasio, vitamina C, otros minerales
Un aporte insuficiente favorecer el incremento de la presión arterial.
- Vitamina D.
Un aporte insuficiente se asocia con dislipemia, deterioro endotelial y mayor riesgo cardiovascular.
- Omega 3.
Importantes en el control de triglicéridos, mejora de la salud del endotelio y control de arritmias.
- Fibra.
Un aporte adecuado ayuda a la regulación de glucemia y lípidos sanguíneos, además de mejorar el tránsito y la microbiótica intestinal.
- Proteínas.
Un aporte adecuado ayuda en el control de la presión arterial por contribuir a aumentar el flujo plasmático renal, la tasa de filtración glomerular y la excreción de sodio, además del aminoácido arginina tiene acción vasodilatadora.
Conclusión
Una vez se ha ingresado, el enfermo pasa a ser un paciente y en un sentido pierde su “identidad»: Ya no controla su ritmo de vida, viste su ropa, etc. Además, se tiene el control del tipo de dieta que tiene que ingerir el paciente.
En resumen, se ha de trabajar para hacer más llevadera una situación de ingreso en un hospital, muy estresante para enfermo y familiares. Las comidas tienen que ser un momento agradable y que sirva de» desconexión». Está claro que la comida del hospital nunca será como la casera, pero esto no es excusa para servir algo que nadie quiere comer.
Bibliografía
- Francesc Fatjo Hurios Director general de MACA Profesor Asociado universitat de Barcelona. Medicina interna SCIAS -Hospital de Barcelona.
- Organización Mundial de la Salud (OMS).
- Ortega RM, Jiménez AL, Perea JM, Navia B. Desequilibrios nutricionales en la dieta media española.
- Ortega RM, Navia B, López- Sobaler AM, Aparicio A. Ingestas diarias recomendadas de energía y nutrientes para la población española.
- Wu D,Meydani SN.Age-associatef changes un inmune function impact of vitamin E intervention and the underlying mechanism.